google-site-verification: google7dcda757e565a307.html

Cómo afecta el abuso verbal en parejas.

Me han llamado inútil y me siento mal.

Autora: Ana Hidalgo

 

-Ana, he sufrido abuso verbal, me han llamado inútil tantas veces que me siento como si realmente lo fuera.

-Estoy fatal en el trabajo y lo estoy pagando con mi pareja

Aunque dolorosa, esta es una realidad que escucho mucho en consulta.

Y es que, recibir ofensas verbales repetidamente, ya sea de tu pareja, tu jefe o un desconocido, acaba afectando.

Ya en su día di varios tips sobre qué hacer ante una agresión verbal, y también hablé sobre relaciones tóxicas y cómo terminar con ellas, hoy quiero explicarte cómo pueden afectar a tu relación de pareja los abusos verbales de terceros.

¿Qué es el abuso verbal?

A todos nos han insultado alguna vez, e incluso todos hemos hablado mal a alguien en alguna ocasión, pero el abuso verbal va más allá que eso.

El abuso verbal es una forma de maltrato que supone herir o amedrentar con palabras, risas burlonas, insultos o sarcasmos.

Como sucede en el abuso físico, muchas veces se realiza de forma oculta o encubierta por lo que puede no detectarse fácilmente.

Incluso la persona que padece estas agresiones puede plantearse si realmente se está volviendo loca o exagerando, dado que el agresor suele negar que tal situación se esté dando.

  • Me habrás interpretado mal.
  • No lo dije con mala intención.
  • Eres demasiado susceptible.
  • No sé de qué estás hablando…

Son excusas típicas que tanto agresor como allegados a la víctima suelen dar creando sensación de incomprensión y confusión.

No obstante, el malestar tras la agresión es real y mina la moral y la confianza de quien la padece.

A diferencia del abuso físico, el abuso verbal no deja marcas visibles en la piel, pero sí heridas internas.

Estas heridas a veces se callan por vergüenza, miedo, incomprensión, o simplemente porque se sienten merecedores de ellas.

Hay que tener en cuenta además que, si el abuso verbal es continuado, acaba siendo muy dañino tanto para quien lo sufre directamente, como para sus allegados.

¿Qué sucede cuando sufrimos abusos verbales?

Los estudios científicos han demostrado que al recibir un insulto o una agresión verbal se activan los mismos circuitos cerebrales que se asocian con el dolor físico.

Es decir, el que te llamen “inútil”, por ejemplo, activa las mismas neuronas del dolor que una agresión física.

Pero, además, cuando alguien nos agrede ya sea física o verbalmente, se encienden muchas alarmas en nosotros:

Sentimos dolor, miedo, rabia, indefensión, dificultad para dormir, decaimiento, malhumor, ansiedad, disminuye nuestra atención, estamos más irritables …

Y estos son sólo algunos de nuestros síntomas dado que todo esto interfiere en las relaciones sociales, afectivas y laborales.

Con frecuencia, cuando alguien sufre algún tipo de agresión física, puede ser relativamente fácil entender que va a necesitar apoyo para salir adelante.

Sin embargo, no ocurre lo mismo con las agresiones verbales, pues muchas veces no son tomadas en serio a pesar de que existen estudios científicos que demuestran cómo el cerebro se modifica ante una agresión.

Es más, al sentirnos atacados, nuestro cerebro se activa en modo de “supervivencia”.

¿Qué quiere decir esto? Que pensamos de una forma más impulsiva y menos racional.

Ante esta presión, nuestro cerebro reptiliano es el que asume el control y nuestro cerebro mamífero queda en letargo, por lo que nuestro pensamiento, imaginación y estrategias para planificar se ven alteradas.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que, cuando se sufre algún tipo de abuso, se deteriora considerablemente la autoestima, y decae el estado de ánimo.

Puede que nuestra pareja esté sufriendo agresiones verbales, pero, ¿le hacemos caso?

Existe una tendencia a restar importancia a este tipo de dolor y a tratar de suavizar la situación con frases del tipo:

  • No será para tanto.
  • No hagas caso, pasa de sus insultos.
  • A mí también me han insultado alguna vez y no me pongo así.
  • No te lo tomes tan a pecho…

Lo cierto es que, el abuso verbal produce un daño psicológico importante que tendemos a desestimar.

Esta falta de apoyo en momentos de estrés contribuye a poner trabas a la relación de pareja provocando cierto deterioro.

Por si esto fuese poco, con frecuencia, la persona que sufre abusos verbales atraviesa 4 etapas:

  • Minimiza la situación.

Aquí reprime la tensión que sufre y trata de restarle importancia, lo que conlleva no resolver su situación.

  • Trata de defenderse.

La represión emocional lleva a desarrollar mecanismos de defensa y hace que, como suele decirse: “esté a la que salta”, generando continuas discusiones con la pareja.

  • Explosión emocional.

La ansiedad no canalizada termina explotando con las personas cercanas al proyectar en ellas las inseguridades adquiridas.

Aquí el agredido se convierte en agresor de su pareja.

Si esta situación se repite en el tiempo, puede convertirse en un círculo vicioso.

La situación anterior provoca remordimientos y esto lleva a un mayor desequilibrio emocional, cada vez más caracterizado por altibajos.

Como puedes ver, el ambiente dentro de la pareja se torna cada vez más complicado si la agresión no se maneja bien.

¿Cómo podemos ayudar a nuestra pareja si sufre abusos?

  1. Escucha a tu pareja sin juzgarla.
  2. Acepta su versión de la agresión sin cuestionarla o minimizarla.
  3. Pregunta a tu pareja qué necesita de ti.

En ocasiones, simplemente necesitará un hombro sobre el que llorar y el que escuches será suficiente, mientras que, en otros, querrá que ayudes a buscar una solución.

En cualquier caso, asegúrate antes de qué desea tu pareja en ese momento para poder brindar el consuelo o apoyo que necesita en ese momento concreto.

  1. Si tu pareja no quiere hablar sobre el tema, respeta su decisión, quizás todavía no esté preparada.
  2. Si no puede manejar la situación, anima a tu pareja a pedir apoyo psicológico.

A este respecto, ya sabes que puedes encontrarme en terapia@terapiaconana.com

Sobre la autora:

“Soy Ana Hidalgo, psicóloga de profesión y persona como tú, con grandes experiencias tanto a nivel personal como profesional.

Me dedico a ayudar a personas a superar situaciones difíciles y salir fortalecidas de ellas.

Si quieres recibir semanalmente artículos sobre amor, desamor y relaciones en general, suscríbete gratis a mi blog en terapiaconAna.com”.

 

 

 

 

 

Compártelo con tus amigos